Qué hacen con nuestras pensiones

Lo que me deja cierto mal sabor de boca es que la gente no acabe de darse cuenta del funcionamiento de los mecanismos estatales. Miren, nos encontramos ante el reconocimiento a voz en grito del fracaso de un modelo público de gestión y no cortos ni perezosos adoptan una medida claramente cogida del lado del mercado y nadie dice nada sobre este hecho. El estado para sobrevivir recurre a tácticas de libre mercado y a nadie se le ocurre proponer que sería mejor para todos dejarse de malas imitaciones del mercado y dejar que este actúe de verdad. Por qué dejar que el estado mal-imite al mercado cuando tenemos experiencia de sobra en otros campos de su buen hacer e incluso en este también (véase la exitosa privatización chilena del sistema de pensiones). La propuesta más adecuada dadas las circunstancias sería exigir a los gobernantes que nos devuelvan el futuro, que la gestión de nuestras pensiones nos corresponde a nosotros porque es lo más justo y porque es lo que más nos conviene a todos. Más.