Cuando muchos pedíamos de Piqué mayor coraje y contundencia -yo desde aquí lo he hecho en un sinfín de ocasiones- no nos referíamos a que desde la tribuna llamase "hijos de puta" a unos desalmados fascistoides que le gritaron no se qué. Bueno, pues no es esto, no es esto, Sr. Piqué.
La contundencia, en los discursos y los argumentos. Lo otro para los socialistas y los bardemes, que siempre ha habido clases!!!!
PS: Vía Daniel Herrera, podéis escucharlo aquí.
PSS: Y aquí tiene Piqué un buen ejemplo de cómo afrontar una situación igual:
viernes, junio 02, 2006
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12 comentarios:
Ni tanto ni tan calvo, joder...
Al pan, pan y al vino, vino.
Me parece estupendo.
Es que además les ha llamado hijos de puta sin alterarse.
Olé.
¿Que no es eso? ¿pero tú has visto a una panda de camisas pardas nacionalsocialistas ponerse a berrear? Si fuera un tío soltando eslóganes se le deja largar y a otra cosa, pero con una colección de energúmenos es diferente. Suelen ser violentos si ven que son más que los buenos. Piqué se las ha visto muchas veces con ellos porque persiguen a los peperos por todos los lados y en muchas ocasiones han ejercido violencia, les han lanzado objetos o han intentado, y conseguido, agredirlos. Replicarles como merecen en una de las ocasiones está perfectamente. No es mal síntoma, ya no están tan seguros ni son ya tantos o, mejor dicho, la gente buena está saliendo a la calle y son más que los nazis.
Primero, llamar a esta gente 'hijos de puta' es faltar a la verdad.
Segundo, es negativo para los objetivos del PP. El PP tiene que ser consciente de que hay un doble rasero, por el que no se toleran de igual modo los exabruptos de las izquierdas que los suyos. Por eso tiene que estar especialmente cuidadoso.
Comentarios así alejan al PP del poder.
"Comentarios así alejan al PP del poder."
Sencillamente, no. La gente es más primaria de lo que parece y lo que percibe cuando dejan sin respuesta ciertas agresiones es que los del PP no defienden lo suyo. Y la cosa va directamente a las tripas: si no defienden lo suyo, mal pueden defender los asuntos de los demás. Si hay algo que va a las tripas, no hay manera de que actúe el cerebro. Es la condición humana... y los nazis lo saben, por eso utilizan esos métodos. Cuando te están partiendo la cara no puedes ir de otra manera que a tortas.
Lo del doble rasero da absolutamente igual. Que pongan el exabrupto de Piqué, cuanto más mejor y que lo saquen a los debates, mejor no te pueden poner la réplica. Es más, ha sido una torpeza de la SER sacar la noticia (teniendo en cuenta que estos no hacen otra cosa que propaganda)
Ahora, ni para ti ni para mi, concedo que se puede decir otra cosa en vez de "hijos de puta". Por ejemplo, se les puede llamar cabrones asquerosos o incluso tarados. Eso sí, de la coletilla que les ofreció Piqué no me apeo.
Bueno, pues que mañana entonces als juventudes populares quemen sedes del PSOE, se encadenen en el despacho de Carod enmascarados y salgan a patrullar las calles...
Por cierto, puedo admitir que lo de hijos de puta salga en un momento de nervios, pero no de la serenidad absoluta que demostraba Piqué.
Yo creo que esencialmente tiene razón DonCorleone. Pero la respuesta de Piqué es muy comprensible. Sin ir más lejos, a mí me pasó algo similar en los comentarios en Ajopringue: harto ya de insultos, de presiones progres, es normal que surja el exabrupto.
Pero creo que en realidad, es mejor mantener las formas; eso sí: sin perder la contundencia en la respuesta al adversario.
Y no puedo evitar, en todo caso, cierta simpatía por Piqué que antes no tenía.
"Bueno, pues que mañana entonces als juventudes populares quemen sedes del PSOE, se encadenen en el despacho de Carod enmascarados y salgan a patrullar las calles..."
¡Venga, hombre! Un poquito de escuchar a la gente que nos las hemos visto delante de los energúmenos. Y un poquito de respeto por nuestros actos. Decirle a un cabrón que es un cabrón no es quemarle su sede social. Eso primero. Segundo, no es lo mismo ir a partirle la cara a su casa que, desde tu casa, decirle cuatro cosas. No es lo mismo asaltar un comercio que, desde el comercio, defenderse.
Si tengo que apelar a lo evidente, que Piqué estaba en SUS asuntos, en SU lugar de reunión, con SU gente, mal vamos.
Y, aunque no haya salido en la réplica, reitero lo del doble rasero: en determinadas circunstancias y bien llevado, tener doble rasero puede ser para los que lo tienen una manera de tragar doble cantidad de porquería: se la llevarán puesta del que se defiende y quedará patente que son malos.
Lamento meterme con "argumentos" gruesos, pero Maricomplejines se manifiesta así, diciendo no sé qué de que no sé quién puede quemar no sé qué cosas.
Pero hombre, si es comprensible que harto de altercados -alguien por cierto ha dicho que se escuche a los que los sufren: nosotros, precisamente hemos sufrido bastantes- pueda salirte algún exabrupto, pero no quiere decir que esté bien.
Me parece una postura muy coherente que cuando se critique a los unos cuando lo hacen, se critique también a los otros. Se condena el hecho en sí, no según quién sea el que lo hace.
Dice alguien también que si los unos gritan, los otros tienen que gritar más alto. Hombre, pues mal camino que nos puede llevar a una competición por ver quién es el más cerdo de todos.
Los complejines no salen a la hora de resistirte a llamar en público, desde la tribuna de tu partido, hijo de puta a otro, precisamente.
EN cualquier caso, insisto en el vídeo que he colgado, que es un ejemplo de cómo mantener las formas con una contundencia mucho mayor y con una enorme dignidad. la forma correcta y perfecta, vaya: ni invitarlos a tu casa a dar pregones -Gallardín- ni llamarles hijos de puta, hombre.
Por cierto: Aznar ganó por mayoría absoluta sin dar un grito más alto que otro y sin necesidad de llamarle hijo de puta a nadie. Aunque a buen seguro llas ganas no le faltaron. Atienda al ejemplo quien lo quiera ver.
"Se condena el hecho en sí, no según quién sea el que lo hace."
No vamos a ir por la reiteración, pero creo que en esta frase está el error. No hay "hecho en sí", ni moralmente ni en el ámbito de la ley. La ley recoge la idea de defensa propia, pero precisamente por la idea de puro sentido común de que la defensa al mismo nivel que la agresión es lícita moralmente. En este caso la réplica está muy por debajo de las intenciones, muy violentas dados los antecedentes, de los agresores.
Dos puntualizaciones. Acabo de leer por ahí el recordatorio de un progre sobre salidas de tono de los peperos en la época de la mayoría absoluta. Y sí, sí había réplicas airadas. Aún antes oí a un pepero soltar un "mamarracho" dirigido nada menos que a Alfonso Guerra por exactamente una de sus célebres mamarrachadas.
Piqué tiene que desintoxicarse de tanto ver a Rubianes. Y de más cosas, claro.
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