Me lo explique por favor, que diría aquel. El título de arriba es exactamente el que podemos leer encabezando una noticia en la sección deportiva del inglés The Guardian, y no es que sea el Día de los inocentes en Reino Unido. El presidente de EEUU aseguró este martes que dejó de jugar al golf en 2003 en solidaridad con los muertos de Irak y sus familias. "No quiero que las madres cuyos hijos han muerto recientemente vean jugar al golf al comandante en jefe del ejército", sentenció este martes. "Siento que me debo a las familias -mostrar mi solidaridad como mejor pueda con ellos. Y pienso que jugar al golf durante una guerra solamente envía una señal incorrecta", apostilló. Según propias declaraciones, su última partida de golf fue en agosto de 2003 cuando se le informó de la explosión de un camión en la sede de la ONU en Baghdad, en la que murieron 22 personas. "Esto me sacó de los campos de golf, no merecía más la pena jugar".
Para estar a la altura prometo no beber desde hoy cola cola con burbujas en solidaridad con el terremoto de China. Desde luego el Día de los inocentes no es, ni en Reino Unido, ni en EEUU, pero sin duda habría que inaugurar en su honor el Día de los tontos, pero realmente profundos. Como dice Anthony Gregory, tras más de 4.000 muertos americanos, W. Bush habría hecho bien en volver al golf y en su lugar lo que debería haber dejado era la presidencia.
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1 comentario:
>Para estar a la altura prometo no beber desde hoy cola cola con burbujas en solidaridad con el terremoto de China.
En el contexto de esta entrada, eso es una confesión de responsabilidad en el terremoto de China.
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